QUERIDO LECTOR:

En cada ciclo de tiempo hay un cambio en el planeta Tierra, como siempre ha ocurrido, entonces comienza a surgir fuertemente dos guerras invisibles.  Una es la negativa contra la positiva.  Siempre en cada cambio del planeta ha sido así.  La humanidad se pregunta.  ¿Qué está pasando en el mundo?  La humanidad no está preparada para ese cambio.  Cambio hacia la perfección del ser humano, porque el planeta va hacia el rumbo prometido que nos dejó dicho nuestro único maestro, Jesucristo.  Se está preparando su reinado aquí en el planeta Tierra.  Esa preparación está surgiendo invisiblemente por el momento.

Recibí los mandamientos de la ley del espíritu.  La ley que todos debimos practicar, la ley del espíritu, la ley perfecta.  Es uno de los mandamientos que lo resume todo.  Las verdaderas leyes divinas fueron confundidas por los hombres en el planeta Tierra.  Las leyes divinas son invisibles y se las tenemos que aplicar al espíritu.  Dentro de esas leyes se encuentra esa Luz divina que todos hablan, pero desconocen.  Esa es la Luz para despertar a los hijos en tinieblas.  Para despertar a los que han triunfado en sus buenas obras a través de sus reencarnaciones.  Ahí es que entra el recogimiento que habrá de ocurrir en un tiempo no muy lejano.

Cuando fui limpia internamente practicando la verdadera obediencia al Creador, comencé a recibir Luz.  Una vez la conciencia educada en el plano cósmico, la conciencia comenzó a trabajar.  La conciencia es profunda e interna en el ser, es muy contrario al pensamiento.  El pensamiento está a flor de su mente, porque la mente trabaja muy distinto a la conciencia, porque la mente se manifiesta con las cosas terrenales, mientras la conciencia trabaja con las cosas internas.  Ejemplo: Humanamente los terrenales no usan la conciencia porque no saben utilizarla.  Sin embargo la mente sí está ocupada cada segundo del día y noche.  Todos sabemos que tenemos conciencia, pero no lo dan seguimiento a la conciencia.  Los seres humanos, todo lo aprenden por la mente.  Si supieran educar la conciencia y no la tuvieran dormida, entonces sí podrían descansar la mente.  La mente comete errores, pero la conciencia no.  La conciencia cuando está en toda su pureza puede viajar y regresa con todo grabado en su conciencia, para guardar en su subconciencia hasta que se le permita manifestarse.  Nuestro Señor está preparando a sus elegidos en diferentes partes del mundo.

TESTIMONIO:

En el llamado que me hizo el Señor de las Alturas tuve que entrar en la práctica de la obediencia para poder recibir su "gracia"luego así poder recibir el método de enseñanza para cumplir una misión.  Misión desconocida para mí, porque aún desconocía mi ser interno.  En la práctica de la obediencia celestial, desperté de ese aturdimiento que estaba encerrado en mí a través de los siglos.  Aturdimiento de no poder reconocer mi verdadero origen, el origen de mi espíritu, el origen de mi ser interno.  Pido que no me busquen con nombres en la Tierra, porque ningún nombre se me ha sido dado.  Quiero también que  sepan que las enseñanzas que estoy llevando no son aprendidas carnalmente, porque todo lo carnal no es del espíritu.  Nosotros cuando estamos en un estado de conciencia más elevada, podemos viajar y recoger la verdadera sabiduría, la sabiduría que nos enseña el Espíritu Santo.  Ella no tiene jerarquía en la Tierra, porque no pertenece al planeta Tierra.  Ella es humilde y sumisa.

La ley del espíritu:

La energía pura del espíritu, es el tesoro más poderoso que puede tener un  ser.  Con la energía pura puede escudriñar todos los misterios ocultos del universo.  Por eso en necesario conocer la ley del espíritu y así poder vivir en ella.  La ley del espíritu comienza con la ley de la perfeción.  La verdadera Luz se encuentra dentro de esa ley perfecta, entonces para poder entrar dentro de esa divina Luz es necesario darle seguimiento a esa ley.  ¿Por qué la mayoría de los seres humanos detestan esa Luz?  Porque saben los pasos que tienen que dar para recibirla.  Está grabado en la subconciencia de cada ser en este mundo, pero lo desconocen aún, pero en ese despertar lo reconocerán.  Recordar que la Luz a la que me refiero es a los conocimientos celestiales.  Al origen de VIDA ETERNA que todos llevamos.  Tienen que regresar al origen eterno que fuimos creados.  De eso es lo que se trata estas enseñanzas.  De la creación eterna que todos llevamos, y que aún la desconocen.

Pensamiento:

Los que no tienen los conocimientos celestiales, viven en una cadena de oscuridad.  No tienen la sabiduría que es herencia del espíritu.

Que sean todos bendecidos en ese amor en Cristo. 

                                                     teresa  (teremyr@gmail.com)